La Genial Alineación Coital Incrementa el Placer:
¿Sabías que los estudios han demostrado que hasta un 70% de las mujeres fingen el orgasmo durante el coito? Que la mujer no pueda llegar al orgasmo solamente mediante la penetración no es algo tan raro, como ves. Y es que esta dificultad tiene un motivo evolutivo. Aunque lograr el orgasmo femenino durante la relación sexual sea difícil, lo cierto es que no es imposible. Hoy, vamos a hablar sobre una técnica que ha demostrado ser muy eficaz para conseguir la satisfacción sexual mutua durante el sexo: La Genial Alineación Coital.
Hasta un 70% de las mujeres fingen el orgasmo durante el sexo
La alineación coital es una postura que deriva del clásico misionero. Ha sido diseñada para incrementar el placer de la mujer y lograr su clímax durante la penetración, ya que favorece la estimulación del clítoris, que es el principal encargado del orgasmo femenino. Ya sabemos lo que estas pensando: “¿El misionero? Así no creo que llegue al clímax…”. ¡Nada más lejos de la realidad! Es increíble lo mucho que puede cambiar el placer de esta postura con solo añadir unas pequeñas variaciones. ¡Merece la pena probarlo!
Para realizar la alineación coital, tenemos que partir de la postura del misionero. La mujer ha de mantener las piernas ligeramente cerradas, para que la estimulación del pene contra las paredes vaginales sea más intensa para los dos. Otro truco importante es mantener la pelvis elevada, facilitando el ángulo de penetración y consiguiendo que sea más profunda. Puedes colocar una almohada o cojín bajo tu cadera para estar más cómoda.
Entonces, el hombre se coloca encima de la mujer, de manera que las caderas de ambos queden alineadas (de ahí el nombre de la técnica). Una vez que la mujer esté adecuadamente lubricada y comencemos con la penetración, el hombre debe moverse de arriba a abajo (en lugar de hacia delante y hacia atrás, como se hace típicamente). Aquí se encuentra la clave de la alineación coital: en lugar de meterla y sacarla a toda velocidad, vamos a centrarnos en subir y bajar suavemente, rozando el clítoris con fricciones y toques delicados, provocados por el encuentro de las caderas y el pubis de los dos. ¿Quieres un pro tip? Para maximizar la estimulación, la mujer puede ayudar moviendo la cadera al mismo ritmo, buscando que las fricciones se den justo donde las necesita.
Cuanto más lento y profundo sea el movimiento, mayor será el placer…
Esta pequeña variación en la postura del misionero hace que el pene roce más con la pared interna del clítoris a la vez que con su zona externa, aumentando enormemente el placer en la mujer y permitiéndole llegar al orgasmo durante las relaciones sexuales, cosa que, desgraciadamente, no siempre ocurre…
Ahora ya tienes las nociones básicas para probar esta técnica con tu pareja. Como puedes ver, con unos pequeños ajustes podrás lograr grandes resultados. ¿Y qué resultado hay más grande que el orgasmo? Esperamos haberte ayudado y que pongas en práctica la alineación coital. Y si ni siquiera así logras el orgasmo con tu pareja, ¡no pasa nada! Hay otras formas de sexo mucho más efectivas…
¡Dejemos atrás eso de fingir orgasmos durante las relaciones sexuales y empecemos a experimentarlos!