Edging Todo lo que Necesitas Saber

Edging Todo lo que Necesitas Saber

Edging Todo lo que Necesitas Saber. Los sexólogos llevan proponiéndolo años para mejorar la calidad de las relaciones y también como método para los hombres que quieren retrasar el momento de la eyaculación. Para variar, ahora llega una palabra en inglés y lo pone de moda. Así estamos.

En español vendría a ser la técnica de parada y arranque y entronca con la tendencia del ‘slow sex’, ‘slow food’, ‘slow life’ y todos los demás slows para luchar contra las prisas de vivir corriendo sin pararse a disfrutar de nada. Estar al borde del orgasmo retrasándolo todo lo posible, o lo que quieras, eso es el ‘edging’.

¿Qué beneficios tiene esta técnica?

Los beneficios del ‘edging’ son tanto físicos como psicológicos. Para empezar, si eres capaz de conocerte hasta el punto de identificar el punto de no retorno y bajar el ritmo justo antes de llegar al orgasmo para continuar con la estimulación serás más consciente de las sensaciones y de la excitación y prolongarás el placer en el tiempo.

También el clímax, una vez que te dejes llevar por la ola, será más poderoso, tanto psicológica como físicamente. La sensación de recompensa se une con la resolución de la tensión sexual acumulada durante el encuentro. Como resultado, más placer durante más tiempo y un orgasmo más profundo e intenso. No está mal.

¿Quiénes pueden practicarlo?

Pues tú, si te apetece. Se trata de controlar la excitación para retrasar el orgasmo, no de hacer 200 dominadas en cinco minutos, así que está al alcance de cualquiera que quiera conseguirlo.

¿Se puede practicar edging en pareja?

Por supuesto, aunque te aconsejamos que le comentes antes lo que vas a intentar para que entienda lo que está pasando y no piense que ha dejado de excitarte. Habladlo, y si los dos estáis de acuerdo, probadlo, es una técnica válida para hombres y para mujeres, ya que ambos pueden prolongar el placer y controlar la excitación y la estimulación para retrasar el clímax. Además, es fantástico para salir de la rutina y disfrutar de otro tipo de sexualidad que vaya más allá del ‘aquí te pillo aquí te mato’.

La técnica definitiva contra la eyaculación precoz

De hecho, esta técnica nació en las consultas de sexología como método para ayudar a los hombres insatisfechos con su tiempo de eyaculación. La llamada eyaculación precoz no es otra cosa que eyacular antes de lo que te gustaría, y en la mayoría de los casos se debe a una sexualidad mal aprendida. Para abreviar, cuando empezaste a masturbarte aprendiste a hacerlo rápido para acabar lo antes posible, normalmente, por temor a que alguien abriera la puerta del cuarto y te pillara.

El ‘edging’ o la técnica del arranque-parada es fantástico para reaprender a estimularte, a solas o en pareja, identificando las sensaciones de tu cuerpo y siendo más consciente para bajar el ritmo o cambiar la estimulación antes de llegar al punto de no retorno en el que el orgasmo o la eyaculación ya es inevitable.

Cómo practicar ‘edging’ paso a paso

  • En primer lugar no te obsesiones, se trata de conocerse cada vez mejor y descubrir los propios límites, algo que, evidentemente, no vas a lograr en un día.
  • Es mejor comenzar a probar a solas, sentirás menos presión y al estar pendiente exclusivamente de ti (algo que esperamos que no hagas en pareja) será más fácil darte cuenta de la cercanía del clímax y parar para relajarte.
  • Si lo estás practicando en pareja la comunicación es clave. Primero tienes que identificar la proximidad del orgasmo y parar o cambiar la estimulación.
  • Si se produce durante la relación sexual, cambia de postura y de velocidad, o céntrate un ratito en estimular a la otra persona.
  • En pareja, como la relación será más larga, no te centres exclusivamente en la penetración. No deberías hacerlo nunca, pero en este caso es más importante que combines la penetración con las caricias y la masturbación manual y oral para evitar que la penetración se vuelva incómoda o dolorosa. Ya sabes que si rascas mucho tiempo en el mismo sitio, duele.
  • Explórate, experimenta y lo más importante, recuerda que haces esto para disfrutar más, si no es así, si te produce agobio o malestar retrasar el orgasmo, no lo hagas. El sexo debe ser sinónimo de placer. Siempre.